En este artículo os presentamos una guía paso a paso de cómo acondicionar y preparar el suelo del huerto o jardín a la hora de plantar árboles, tanto frutales como ornamentales, para que éstos crezcan fuertes y sanos.
Introducción
“El mejor momento para plantar un árbol fue hace veinte años. El segundo mejor momento es ahora”.
Los árboles son unos seres vivos maravillosos que aportan una gran variedad de beneficios: nos proporcionan alimentos, regulan la temperatura y la humedad del ambiente, nos ayudan a combatir el cambio climático y, no menos importante, nos proporcionan belleza y mejoran nuestra calidad de vida y salud. Por este motivo, plantar árboles, ya sean frutales u ornamentales, es una de las actividades que más disfrutamos en LivingChar. Para que puedas disfrutarla tú también en este artículo vamos a compartir una guía paso a paso de cómo plantar un árbol creando las mejores condiciones para su implantación y correcto desarrollo.
Antes de comenzar, es interesante resaltar que el otoño es una temporada ideal para plantar árboles en climas como el nuestro (también el invierno puede ser una buena época en los climas mediterráneos, especialmente si no hay fuertes heladas en la zona donde vayamos a plantarlos). En los climas mediterráneos los veranos vienen acompañados de altas temperatura y bajos niveles de precipitación y estas circunstancias ponen en peligro la supervivencia de los árboles, especialmente cuando estos son jóvenes. Por lo contrario, si los sembramos en otoño incrementamos sus probabilidades de supervivencia porque en esta época la humedad presente en el suelo se mantiene más tiempo gracias a las lluvias típicas de estos meses y a la menor evaporación que se produce debido al descenso de las temperaturas. Además, con la bajada de las temperaturas en el invierno todos los procesos naturales se ralentizan y esta lentitud será ideal para que el árbol se vaya adaptando a su nuevo espacio antes de que lleguen los calores. Así que, si tienes pensado plantar un frutal o un árbol en tu jardín, ¡ahora es el momento!
Cuestiones previas a considerar a la hora de plantar un árbol
Si queremos que nuestro árbol crezca sano y fuerte deberemos tener en cuentas, antes de plantarlo, cuáles son sus necesidades específicas y el contexto en el que crecerá. Los árboles son las plantas más grandes y longevas y esto hace que la selección de la especie y el emplazamiento sean decisiones fundamentales de diseño, especialmente si disponemos de poco espacio.
Para la selección de la especie a plantar tenemos que considerar que cada árbol está adaptado a unas determinadas condiciones climáticas, tipos de suelos y niveles de radiación solar diferentes. Por este motivo, conocer en qué lugar y contexto pensamos plantar un árbol es fundamental. Entre las cuestiones relevantes a considerar destacan:
- si se dan heladas o no durante el invierno,
- las temperaturas máximas que se pueden alcanzar en verano,
- la pluviometría de la zona,
- respecto al suelo, necesitamos saber si el suelo es más o menos arenoso o arcilloso, o si está más o menos compactado.
- la altura, extensión y ritmo de crecimiento de las especies de árboles que estamos contemplando.
En cuanto al emplazamiento, especialmente si vamos a plantar en un jardín, es importante evaluar las posibles interacciones que tendrá el árbol con otros elementos (como pueden ser otros árboles, construcciones o cables aéreos cercanos) y la sombra que producirá a medida que éste crezca. También será importante considerar si el árbol, dependiendo de su especie, va a necesitar un emplazamiento con mucha o poca radiación solar, o estar más o menos protegido frente a los vientos que puedan darse en la zona (por ejemplo, muchos árboles de hojas grandes prosperarán en un sitio protegido y parcialmente sombreado, pero podrían no desarrollarse correctamente en uno expuesto, donde el follaje esté sujeto a vientos fuertes y altos niveles de luz). Si lo que vamos a plantar es un árbol frutal el emplazamiento ideal será, por lo general, un lugar soleado y protegido del viento.
La plantación de un árbol incluyeun trabajo previo de recopilar información sobre la zona donde estamos pensando plantarlo (suelo, climatología y condiciones específicas del lugar, principalmente). Luego podremos seleccionar la especie o variedad en función del lugar y de lo que esperamos del árbol. Por último, escogeremos la ubicación ideal en nuestro huerto o jardín en función de las características del árbol escogido.
Para la selección del árbol, siempre podemos preguntar a nuestro viverista de confianza u observar los árboles que se desarrollan bien en nuestra zona. Os dejamos a continuación varios enlaces interesantes para seleccionar árboles y variedades en función del tipo de suelo y sus necesidades de agua:
Necesidades hídricas de los árboles frutales
Cómo crear las mejores condiciones para nuestro árbol
Más allá de las cuestiones mencionadas anteriormente, la mayoría de los árboles prefieren vivir en un suelo en el que haya una adecuada circulación de agua y gases, y que facilite el desarrollo de las raíces. Los suelos compactados, pobres en nutrientes, erosionados o faltos de vida, dificultarán que nuestro árbol se implante adecuadamente, lo harán más propenso a enfermedades y plagas y, en definitiva, incrementarán las probabilidades de que nuestro árbol muera de forma temprana. Por lo tanto, es muy importante observar el suelo donde vamos a plantar nuestro árbol y acondicionarlo adecuadamente para que éste crezca sano y fuerte.
Para acondicionar el suelo te recomendamos el uso del biochar y de un compost de calidad. Con ellos, mejorarás la estructura de tu suelo y aportarás todos los nutrientes que tu árbol necesita:
- En el caso de que tengas un suelo pesado, con tendencia a compactarse, el biochar reducirá su densidad y facilitará el desarrollo de las raíces.
- En el caso de que tengas un suelo arenoso, el biochar hará que la humedad se mantenga más tiempo alrededor de las raíces, reduciendo así el estrés hídrico del árbol. También ayudará a que los nutrientes se mantengan más tiempo en la zona cercana a las raíces, lo que mejorará la nutrición y salud de tu árbol.
- Al añadir el compost, estarás mejorando el contenido de nutrientes de tu suelo y estimulando la vida de tu suelo, y eso hará que tu árbol esté mejor alimentado y mejor preparado para enfrentarse a enfermedades y plagas.
Dicho todo esto, vamos a ver qué necesitamos para plantar un árbol y qué pasos seguir.
Materiales a utilizar a la hora de plantar un árbol
A la hora de plantar un árbol necesitaremos las siguientes herramientas y materiales:
- Una regadera
- Un cubo
- Una pala
- Una horca
- Una estaca y brida de fijación para árbol
- Material para acolchar (mantillo, paja, restos de siega o de cultivo, por ejemplo)
- Un buen compost: compost ecológico enriquecido con biochar
- Biochar fertilizado
Cómo plantar un árbol paso a paso
Paso uno:
Una vez seleccionada la ubicación del árbol haz un agujero en el suelo. El ancho del agujero será de tres a cuatro veces el diámetro del tiesto del árbol. En cuanto a la profundidad, ésta deberá ser una vez y media mayor que la profundidad del tiesto.
Al hacer el agujero, usa la horca para soltar las paredes y reducir así su compactación.
Mientras haces el agujero, es recomendable sacar el árbol del tiesto y ponerlo dentro de un cubo lleno de agua para que las raíces se humedezcan antes de la plantación (puedes incluso poner las raíces del árbol en agua, sin clorar preferiblemente, durante la noche anterior)
Una vez seleccionada la ubicación del árbol haz un agujero en el suelo. El ancho del agujero será de tres a cuatro veces el diámetro del tiesto del árbol. En cuanto a la profundidad, ésta deberá ser una vez y media mayor que la profundidad del tiesto.
Al hacer el agujero, usa la horca para soltar las paredes y reducir así su compactación.
Mientras haces el agujero, es recomendable sacar el árbol del tiesto y ponerlo dentro de un cubo lleno de agua para que las raíces se humedezcan antes de la plantación (puedes incluso poner las raíces del árbol en agua, sin clorar preferiblemente, durante la noche anterior)
Paso dos:
En el fondo del hoyo pon entre 2 y 5 litros de biochar fertilizado, en función del tamaño del hoyo, y mézclalo bien con la tierra del fondo. El biochar servirá para crear una reserva extra de agua y de nutrientes para nuestro joven árbol, lo que le ayudará a establecerse. También creará un hábitat para que los microorganismos beneficiosos (hongos y bacterias, principalmente) se establezcan, lo que mejorará la nutrición y salud de tu árbol. Si tienes a mano unas micorrizas, este es el momento de aplicarlas (las micorrizas son unos hongos que se asocian con las raíces y potencian su crecimiento) Extiende las micorrizas sobre la mezcla de tierra y biochar, especialmente en la zona donde estarán las raíces del árbol.
Luego, saca el árbol del cubo con agua y con las manos suelta con cuidado las raíces tratando de desenredarlas. Aprovecha para frotar un par de puñados de biochar por las raíces del cepellón; esto estimulará su desarrollo.
Paso tres:
Clava en el agujero la estaca que servirá de tutor y coloca el árbol al lado, tratando de extender las raíces bien. Coloca la estaca del lado del viento dominante para que cuando este sople, sujete el árbol.
En este momento, es importante asegurar que la parte superior del cepellón está al mismo nivel que el borde del agujero que hemos hecho. Si no, agrega o quita tierra. En el caso de frutales, una comprobación importante a realizar es mirar que el injerto nos queda por encima del nivel del hoyo de forma que cuando cubramos las raíces con la tierra, éste no quede enterrado.
Para asegurarte de que tienes bien colocado el árbol puedes colocar una caña tumbada sobre los bordes del hoyo y comprobar que la parte superior del cepellón está justo por debajo de la caña y el injerto, en el caso de un árbol frutal, queda por encima.
Paso cuatro:
Es el momento de rellenar el agujero. Para ello, utiliza la tierra que has retirado anteriormente y la mezclas con el compost enriquecido con biochar. Con esto estarás aportando una buena cantidad de materia orgánica y nutrientes que promoverán el crecimiento del árbol. El biochar hará que el suelo sea menos pesado, que retenga mejor la humedad y hará que los efectos del compost se prolonguen más en el tiempo. ¿Cuánto compost poner? Una cantidad ideal es poner 1 medida de compost por cada 4 de tierra.
Es importante asegurar que, cuando rellenas el agujero, hay buen contacto entre la mezcla de tierra y compost y las raíces de nuestro árbol. Para ello, compacta el terreno pisando alrededor del árbol a medida que vas rellenando el agujero con la tierra; así evitarás que puedan quedar huecos donde se retendría agua que podría dañar las raíces de tu árbol.
Paso cinco:
Riega bien toda la zona donde has rellenado con tierra. Posteriormente, añade una capa de compost por encima y cubre con una buena capa de acolchado (mínimo de 5 cm de espesor). El acolchado protegerá las raíces del árbol de las heladas y estimulará la actividad de los microorganismos beneficiosos para tu árbol. Además, el acolchado ayudará a mantener durante más tiempo la humedad del suelo, con lo que el árbol sufrirá menos estrés hídrico entre riegos.
Te dejamos aquí un enlace para que sepas como acolchar correctamente tu nuevo árbol: cómo acolchar correctamente árboles frutales
Paso seis:
Una vez tienes el árbol plantado, vamos a fijarlo al tutor que colocamos en el paso 3 para darle mayor estabilidad (esto es especialmente recomendable si el árbol tiene una copa grande o si lo estás plantando en una zona de fuertes vientos). Para ello, coloca unas bridas de fijación entre el tronco del árbol y la estaca que has colocado.
Paso siete: Ya tienes tu árbol plantado ¡Pero ojo! Eso no significa que tu trabajo haya acabado. Durante el primer año, los árboles necesitan ciertos cuidados para ayudarles a implantarse. El principal es regarlo bien, especialmente en los meses más secos y cálidos.
Esperamos que disfrutes mucho plantando tu árbol. Si tienes cualquier consulta, no dudes en dejar un comentario o contactar con nosotros.